miércoles, 9 de junio de 2010

Imperialismo

1 De la dominación colonial al imperialismo:

Ø Según Baladier: Dominación colonial es la “dominación impuesta por una minoría extranjera, en nombre de una supuesta superioridad racial y cultural, dogmáticamente afirmada, sobre una mayoría autóctona materialmente inferior”.

Ø Según Wolfgang Mommsen. En cuanto a la diferencia entre dominación colonial e imperialismo dice: “Al mismo tiempo (hacia 1885) se transformaba el carácter de la dominación colonial europea; de la noche a la mañana se convertía el colonialismo en imperialismo. Hasta entonces las potencias europeas habían dejado toda la iniciativa a los grandes colonizadores y a las empresas colonizadoras (...). En todo caso, se había tratado de reducir al mínimo la propia intervención política y militar. Ahora la situación se había convertido en lo contrario; impulsadas por un nacionalismo que había desembocado en imperialismo, las potencias europeas empezaron a perseguir sistemáticamente la adquisición de nuevos territorios coloniales y a respaldar con capital propio la conquista y penetración económica en los países subdesarrollados, pero ya en la fase inicial y no, como hasta entonces, solo cuando las cosas habían alcanzado un cierto grado de madurez”.
Wolfgang Mommsen “La época del imperialismo”.

Ø Según Vladimir Lenin: Partiendo de la teoría de Karl Marx acerca de la acumulación de capital, Lenin caracterizó el imperialismo por la creación de monopolios que dominaban la economía, y por la importancia cada vez mayor del capital financiero frente al industrial, hasta el extremo de que se sustituyó la exportación de productos por la exportación de capitales. Como consecuencia de este proceso –y según lo que Lenin preveía- se produjo el reparto del mundo entre los trusts financieros.


2 Causas del imperialismo:

Ø Ayer estuve en el East End de Londres y asistí a una asamblea de desocupados. Al oír en dicha reunión discursos exaltados cuya nota dominante era: “pan, pan” y al reflexionar cuando regresaba a casa sobre lo que había visto, me convencí más que nunca de la importancia del imperialismo... La idea que yo acaricio representa la solución del problema social, a saber: para salvar a 40 millones de habitantes del Reino unido de una guerra civil funesta, para nosotros, los políticos coloniales, debemos posesionarnos de nuevos territorios para colocar en ellos los excesos de población, para encontrar nuevos mercados en los cuales colocar los productos de nuestras fábricas y de nuestras minas. El Imperio, lo he dicho siempre, es una cuestión de estómago. Si no queréis la guerra civil, debéis convertiros en imperialistas. C. Rhodes, empresario inglés, 1895

Ø “La política colonial se impone en primer lugar en las naciones que deben recurrir a la emigración, ya por ser pobre su población, ya por ser excesiva. Pero también en las que tiene superabundancia de capitales o bien un excedente de productos; esta es la forma actual más extendida y fecunda... Pero hay otro aspecto de esta cuestión mucho más importante: la cuestión colonial es, para países como el nuestro dedicados por naturaleza misma de su industria, a una gran explotación, el problema mismo de los mercados. Allí donde se tenga predominio político, se tendrá también predominio económico... En esta Europa nuestra, en esta competencia de tantos rivales que crecen a nuestro alrededor la política de recogimiento o de abstención no es otra cosa que el camino de la decadencia.
Jules Ferry. Francés.

Ø “Señores hay un segundo punto, un segundo orden de ideas que debo abordar, lo más rápidamente posible, es el aspecto humanitario y civilizador de la cuestión... Es necesario decir abiertamente que las razas superiores tienen un deber respecto de las inferiores... porque hay un deber hacia ellas: el de civilizarlas...” Jules Ferry.

Ø “No son capaces de ejercer el gobierno propio. ¿Cómo podrían serlo? No forman una raza capaz de gobernarse a sí misma. Son orientales... Sr. Presidente, este problema es racial. Dios no ha venido preparando durante 1000 años a los pueblos teutónicos y de habla inglesa para una vana actitud de auto contemplación y auto admiración. No. Nos ha convertido en organizadores magistrales del mundo para imponer el sistema allí donde reina el caos. Nos infundió el espíritu del progreso para abrumar a las fuerzas de la reacción en todos los rincones de la tierra. Nos inclinó al gobierno para que podamos gobernar a los pueblos salvajes y seniles.
Si no fuera por esta fuerza el mundo recaería en la barbarie y la oscuridad. Y en toda nuestra raza Él (Dios) señaló al pueblo norteamericano, como la nación elegida para que dirija la regeneración del mundo”.
Senador Beveridge de los EEUU.

Ø “El pueblo alemán, unido en un espíritu de concordia patriótica, será el bloque de granito sobre el que Dios nuestro Señor podrá edificar y rematar la obra civilizadora que El se propone en el mundo.”
Guillermo II Emperador alemán.

Ø “Vosotros podéis dividir a las naciones del mundo en naciones vivas y naciones muertas... Los Estados débiles están en tren de ser más débiles y los Estados más fuertes se convierten en más fuertes... Las naciones vivas se apoderan gradualmente de los territorios de las muertas”.
Lord Salisbury. Político británico.

El tejido de alianzas:
Las rivalidades y los peligros de la guerra determinaron la firma de pactos y la formación de alianzas ofensivas y defensivas. En 1882, Austria- Hungría, Italia y Alemania firmaron el pacto defensivo de la Triple Alianza; en 1887 Alemania se acercó al Imperio ruso prometiendo su neutralidad su Rusia era atacada por Austria, pero en 1890 rompió su alianza y acordó con Inglaterra; en 1892 Rusia, ahora alejada de Alemania, firmó un acuerdo defensivo con Francia por medio del cual ambas naciones prometían atacar a Alemania en caso de una ofensiva de la Triple Alianza. La guerra de los Boers en Sudáfrica distanció a los alemanes (que habían apoyado a los boers) de los ingleses (que temían el crecimiento de Alemania como potencia industrial y colonial ) y en 1904 se firmó el tratado anglo –francés de la Entente Cordiale. De este modo, quedaban delimitados dos grandes bloques: por un lado, la Triple Alianza; por otro, la Entente –a la que se unirá Rusia-: este panorama de acuerdos determinará la conformación de los dos bandos enfrentados en la Primera Guerra Mundial.

El genocidio de un continente:
Aunque el continente africano, desde la Edad Moderna, ya conocía la penetración colonialista, fue recién a partir de la Conferencia de Berlín (1884- 1885) que se establecieron normas para su reparto. La consecuencia fue que, en menos de treinta años el dominio europeo pasó de ejercerse sobre un 11%, a ejercerse sobre un
90% del territorio africano.

Formas de administración:
· Colonias de Poblamiento
· Colonias de Explotación
· Colonias como Protectorado.

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